MAYNOR XAVIER CRUZǁ Imaginemos por un momento que algún autor de nuestro país sea vetado por su pensamiento político, imaginemos que por eso nos perdimos de una de las grandes novelas que otros disfrutaron veinte años atrás, cuando salió publicada por primera vez; parece imposible de creer que eso suceda, sin embargo sí pasó, tal vez porque nadie quería que alguien contara los horrores que significó un hecho histórico que en otros países del mundo celebran sin saber las repercusiones que dejó a su paso al país invadido. Y los hechos históricos tienen esa doble interpretación semántica: por aliados o por los contrarios. Solo quienes lo sufrieron saben contarnos con detalles y eso a veces es tan increíble como la ficción.
Cuando uno lee Ensayo sobre la ceguera de José Saramago vive la experiencia de la destrucción de una ciudad, una historia distópica que nos hace sentir en carne propia los horrores de toda una nación cuando una ceguera empieza a atacar a sus habitantes y los que pueden ver buscan la manera de separarse de los que la han contraído, quizás la misma sensación podrían sentir al leer La insoportable levedad del ser de Milan Kundera, aunque la historia es de un triángulo amoroso, uno vive el engaño de lo que significó la Primavera de Praga para los checoslovacos en 1968, esa ceguera que hizo que los checos creyeran que los rusos harían de su nación un lugar mejor.
Mientras asistimos a los encuentros sexuales del protagonista (Tomás) con su mujer (Teresa), una fotógrafa que le perdona sus infidelidades porque encontró en el amor que necesitaba para su vida, también lo seguimos él a que se encuentre con su amante más casual (Sabina); este triángulo sexual pasa por altibajos mientras vemos cómo se va cayendo poco a poco la nación.
Tenemos tres historias paralelas y cada uno de los protagonistas justificando lo que hace frente al otro. No solo tenemos una novela filosófica, también una eterna reflexión sobre la historia, la política, el sexo y el amor.
El comunismo fue un espejo roto que rompió millones de rostros, tal vez el amor de Tomás y Teresa tuvo más solidez que todo el proyecto político que llegó a cambiarles la vida no solo a ellos sino al resto de la población. Ellos nos llevan de la mano para que nosotros también sintamos lo que se vivió desde que los rusos llegaron en 1968. Algunos amores tienen que auto inmolarse para ver las cosas con mayor claridad, ese tal vez sea el mensaje que nos deja el autor cuando uno termina de leer esta novela.
Al final los caminos que escogieron fueron los mejores para salvar su amor propio y su libertad.
Por suerte la novela también la están disfrutando los checos en su propio idioma luego que fuera eliminado el veto al autor. Lo único insoportable de la novela es que no la hayan disfrutado desde que fue publicada.
Milan Kundera ǁ La insoportable levedad del ser ǁ336 pág ǁ 2005 ǁ Tusquet Editores S.A.